Hace por lo menos dos meses, sin exagerar, de verdad, que salieron los capullos. De repente empezaron a ponerse gorditos, gorditos y esta semana TA CHAN!!!!
Vaya promesa..jjj. Menos mal que la voz de la experiencia, me ha dado la clave ;)
Bueno, ahí van cosas... Sobre conchas acolchadas (cuando acabará esto, señor?), un libro que me pasó una compañera. Me emocionó mucho, porque me lo pasó así, sin más. Ella apenas me conocía y no sé, es precioso. Así que cabra, osa, plato, aquí tenéis una idea de lectura CORTA, yupiiii. Son retratos cortos suigéneris de personajes no menos suigéneris. Animaos.
Aquí os mando unas cuantas fotos y links, para que vayáis viendo lo que me inspira para mi próximo proyecto patchworkero.
Ella siempre inspira, aunque me da vergüenza decírselo, igual le da un patatús cuando vea el resultado de su inspiración. Tranquilas platos, cabras, osas, os costará un rato en ver la luz al final del tunel.
Y el detonante es este encantador pajarico. Pio, pio.
Espero que su dueña, no se cabree por colocar aquí su foto. De hecho ahí va unpoco de publi, por si las moscas. Aunque yo la encontré por aquí.
Ala ahora, ya os he liado un poco. En cuanto vaya teniendo las telas os haré una fotico propia, nada de robá.
Viendo esta foto todos dirías que sí que vivo en esa maravillosa isla de la calma, cálida, soleada, de aguas cristalinas... ¿no?
Y ahora ¿cómo se le queda el cuerpo a los ingleses que vienen a torrarse estos días? Jejeje. La playa de Alcudia, una playa grande preciosa, enorme, rodeada de hoteles, apartamentos, resorts (por eso la sabia cámara enfoca al mar y no a la orilla) en plena semana santa vacía. Sólo estábamos unos quince personajes, nosotros dos con paragüas, los ingleses, con paragüas ni de coña claro. Incluso alguno de ellos se animo a bañarse.
Por cierto, esto es un consejo para los amantes de semana santa, pasen a ver ese jesucristo aún vivo y sin estigmas, que francisquillo se encontró en el campo mallorquín.